Según explicó la científica del Conicet y autora del trabajo, Gabriela Merino, estas moléculas impactarían en el desarrollo y progreso de enfermedades y en procesos virales.
“Los microARNs tienen la capacidad de regular la expresión de los genes, con impacto tanto para el desarrollo y progresión de enfermedades como en procesos virales, por eso su importancia”, señaló Merino.
Los investigadores determinaron, a través de mecanismos de inteligencia artificial, que moléculas del nuevo coronavirus regulan genes en las células que el virus infecta, y que esos genes, afectados, se podrían asociar a enfermedades cardiorrespiratorias.
“Identificamos posibles microARNs de SARS-CoV-2 que podrían estar silenciando al menos 28 genes humanos, muchos de ellos relacionados con enfermedades cardiorrespiratorias e infecciones virales, incluso producidas por otros coronavirus”, señaló Merino, bioingeniera, investigadora del Instituto de Investigación y Desarrollo en Bioingeniería y Bioinformática (IBB) de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) y del Conicet.