El informe sostiene "Bajo el escenario de crisis Covid-19, las capacidades monetarias de los hogares experimentaron un deterioro abrupto y pronunciado, con efecto regresivos sobre la pobreza y la indigencia"
En este sentido, el director del Observatorio Social de la UCA, Agustín Salvia, afirmó que "sin la AUH, el IFE, la Tarjeta Alimentar y el resto de los subsidios, la indigencia hubiera sido el doble y la pobreza hubiese trepado al 53%".
"El nuevo escenario paralizó aún más la inversión, los consumos y la demanda de empleo en la economía formal, frenó toda expectativa de reactivación, afectando especialmente a la pequeña y mediana empresa, profundizando la relación entre informalidad económica, pobreza y exclusión social".
Los números hubieran sido mayores si el Estado no implementaba medidas de ayudas para enfrentar la situación, en la que resultó determinante la llegada de la pandemia.
Los datos revelados por la alta casa de estudios indican que estan por encima de los registrados en igual trimestre del año anterior (32,1 y 40,8 por ciento respectivamente)
Según los datos de la Encuesta de la Deuda Social Argentina (EDSA), entre julio y octubre 34,9% de los hogares y 44,2% de las personas se encontraban bajo la línea de la pobreza, y 7,3% de los hogares y 10,1% de las personas eran indigentes, los porcentajes más altos de la década.
Salvia remarcó que estos guarismos son "parte de un proceso que lleva diez años de estancamiento, con tres años de caída", entre 2018 y 2020 y agregó: "Es necesario un crecimiento económico y un pacto económico-social para crear empleo porque sino no hay posibilidad de salir de la pobreza".